Ciudadanos logró ayer que todos los grupos municipales apoyasen su moción sobre el problema del suministro de agua potable en las Jaras, que de manera recurrente se interrumpe afectando a las 300 familias que viven en esa urbanización de la capital cordobesa. Solo desde 2017 hasta hoy se han registrado 15 anomalías que han dejado sin agua a la barriada.

El portavoz de Cs, David Dorado, mostró su satisfacción por este consenso político, pero indicó que estarán vigilantes para que se cumpla la moción antes de las elecciones. «Si llega mayo sin que se haya cumplido, esperamos ser nosotros desde el gobierno los que lo llevemos a cabo», indicó el edil.

La moción del partido naranja insta al Ayuntamiento a garantizar el suministro de agua potable en esta urbanización, exigiendo que el tratamiento y vertido del agua se lleve a cabo por una empresa que cumpla con todos los requisitos legales y exigidos por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir.

La sesión plenaria contó con la intervención de Juan Estévez, presidente de la asociación de vecinos de las Jaras, quien hizo un repaso muy crítico de la historia de esta urbanización y del problema de suministro de agua, que tiene más de 20 años. El representante vecinal advirtió a los concejales de que la creación de una comisión puede ser «una trampa para dilatar el problema», algo que, dijo, no permitirán.

Asimismo, denunció con firmeza la postura que ha mantenido hasta ahora el Ayuntamiento, a pesar de que estos vecinos pagan el IBI y están en suelo urbano consolidado, y criticó la postura de la Gerencia de Urbanismo, que ha mantenido que el abastecimiento del agua no dependía de ellos. También responsabilizó a la alcaldesa de no hacer nada, pese a que cuando era delegada del Gobierno sostuvo que era competencia municipal.