El presidente de la AECC en España, Ignacio Muñoz, reclamó ayer al Gobierno central un Plan de Protección Integral para las Familias con Cáncer que adapte la normativa sobre incapacidad y bajas laborales a las secuelas, al tiempo que ha pedido a las empresas acciones para facilitar que los familiares puedan cuidar a los enfermos y los pacientes no vean disminuidos sus ingresos durante la baja.
Por su parte, la ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, recogió el «guante» lanzado por Muñoz y se comprometió a trabajar conjuntamente con la AECC en este sentido. «Cuando el cáncer llega a nuestras vidas no avisa, sino que se atrinchera en nuestras familias y nos sacude como un tornado, poniéndonos a prueba a nivel social, psicológico y económico», reconoció Montserrat.
La ministra se refirió a la «incertidumbre, el miedo, la inquietud y la culpa» que surgen tras el diagnóstico de un cáncer, que va acompañado por la preocupación por la evolución de la enfermedad, pero también por el bienestar emocional y económico de la familia del enfermo. Montserrat destacó el aumento de las cifras de supervivencia del cáncer, que se sitúa en el 53%, y enumeró algunos de los avances en materia sanitaria y social, como la reducción de la jornada laboral al 50% para los padres de los niños hospitalizados.
Las declaraciones del presidente de la AECC y de la ministra de Sanidad se produjeron en el 7º Foro Contra el Cáncer, presidido por la reina Letizia, presidenta de honor de esta asociación. La reina Letizia subrayó la importancia de un «enfoque integral» y «multidisciplinar» en el tratamiento del cáncer y apeló al conjunto de la sociedad para que haya «plena conciencia» sobre el impacto de la enfermedad en los ámbitos familiar, personal y laboral.
