El Ayuntamiento reivindicará a la Junta los carriles bici prometidos. El Pleno acordó ayer reclamar a la Consejería de Fomento y Vivienda que cumpla el convenio que firmó con el Ayuntamiento de Córdoba a finales del 2014 para ejecutar 32 kilómetros de vías ciclistas urbanas, a las que entonces pensaba destinar en dos años 11 millones procedentes de fondos europeos. La moción aprobada ayer, que fue presentada por Unión Cordobesa (UCOR) y consensuada por todos los grupos municipales antes de la sesión plenaria, pone fecha a los deberes de la Junta, ya que le da un plazo de cuatro años para ejecutar la totalidad de los carriles bici contemplados en aquel acuerdo. El Ayuntamiento quiere que Fomento y Vivienda planifique presupuestariamente en los próximos ejercicios los proyectos, de forma que quede finalizada la red prevista entre el 2019 y el 2022. Además de ese plazo, el acuerdo implica que el gobierno local reclamará a la Junta los fondos necesarios para construir los carriles bici más necesarios, los que no puedan esperar más y deban ejecutarse de manera urgente, de forma que para el 2019 quede comprometido al menos el 25% de las tareas pendientes.

Esta moción llega al Pleno casi un mes después de que publicara este periódico que la Junta no ejecutará hasta después del 2020 más carriles bici en Córdoba por falta de fondos, ya que en el programa Feder 2014-2020 no hay más recursos disponibles, y que Fomento y Vivienda esperará a la llegada de nuevas subvenciones europeas para continuar con las vías ciclistas prometidas. De los 31,6 kilómetros contemplados en el convenio, en ejecución solo hay un 10%, 3,2 kilómetros iniciados a finales del año pasado y que deberían estar concluidos este verano. Esos 3,2 kilómetros, entre los que está el carril bici del Marrubial, cierran el anillo del casco histórico y enlazan con El Brillante. La Junta está invirtiendo en ellos 1,8 millones.

Antes del Pleno, el concejal de UCOR, Rafael Serrano, insistió en que «no podemos seguir potenciando el uso de la bicicleta si tenemos carriles que no llevan a ningún sitio», ni «seguir permitiendo que la Junta anuncie planes de inversión en la ciudad a bombo y platillo y se queden en humo».

Al llegar consensuada la moción relativa a los carriles bici, no hubo debate, al igual que ocurrió en las seis restantes en las que también hubo acuerdo previo antes del Pleno. De las ocho propuestas presentadas por los grupos municipales, solo una, la que exigía al Gobierno central que derogue los artículos que «constriñen a los ayuntamientos» -en palabras de la concejala socialista Carmen González- de la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, propuesta por el PSOE, se debatió en un pleno totalmente plano. La única tensión fue la de las protestas previas de la plantilla de Tanatorios de Córdoba, que obligaron a la alcaldesa, Isabel Ambrosio, a suspender el inicio de la sesión durante unos minutos hasta que, a petición de la Policía Local, los trabajadores abandonaron la sala.