El Pleno del Ayuntamiento de Córdoba aprobó ayer con el voto a favor de cinco de los seis grupos municipales modificar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que, una vez pasados otros trámites administrativos, permitirá la construcción de un centro comercial en el parque científico y tecnológico Rabanales 21, que va a permitir a la sociedad unos ingresos de 2 millones de euros, de los que 600.000 euros ya están depositados. Con esta medida, se contribuye a mejorar la delicada situación económica por la que atraviesa la entidad.

Los grupos municipales de UCOR, Ciudadanos, PP, IU y PSOE votaron a favor de esa modificación del plan urbano, mientras que Ganemos, fiel a sus posición en este asunto, voto en contra en defensa del pequeño comercio. El portavoz de Ganemos, Rafael Blázquez, señaló que esa modificación del PGOU supone habilitar un espacio de 15.000 metros cuadrados para la instalación de una gran superficie comercial. que, en su opinión «desvirtúa el carácter tecnológico del parque», instalación de la que dijo que «pudo hacerse con una visión menos faraónica»

Por su parte, el portavoz de UCOR, Rafael Serrano, dijo que esa innovación «supone un balón de oxígeno al parque, que estaba en peligro»; el portavoz de Ciudadanos, David Dorado, indicó que con esa medida se «facilita la creación de empleo», mientras que el jefe de filas del PP, José María Bellido, criticó que la alcaldesa, Isabel Ambrosio, haya tardado dos años en dar viabilidad a ese proyecto.

DESALOJO

Antes de este punto del orden día, la alcaldesa, Isabel Ambrosio, se vio obligada a suspender por una media hora el Pleno ante la sonora protesta de una treintena de parcelistas que reventaron la sesión exigiendo «agua» para sus parcelas. Agentes de la Policía Local tuvieron que desalojar el salón de Plenos, en el que se vivieron algunos momentos de tensión, pero sin llegar a mayores.

PRÓXIMO PLENO

El próximo lunes 31 de julio habrá otro Pleno, este con carácter extraordinario. En él, la Corporación deberá decidir sobre dos asuntos. El primero sobre las inversiones financieramente sostenibles y, el segundo, sobre el proyecto de obras Mi barrio es Córdoba, que ayer tampco entró en el trámite de urgencias. Sobre este asunto, el Pleno deberá levantar varios reparos que la interventora, Paloma Pardo, ha hecho sobre este proyecto del área de Infraestructuras, que cuenta con una aportación de 2,5 millones de euros del Ministerio de Hacienda. El servicio de Intervención municipal sostiene que ese plan de obras no puede ponerse en marcha hasta tanto el Ayuntamiento y el Ministerio de Hacienda firmen el convenio de participación en esa operación. Los grupos de la oposición protestaron ayer por no haber tenido acceso a este expediente.