Rafael Blázquez, de la plataforma Stop Desahucios, afirma que cada semana les llegan unos 40 casos nuevos de familias que temen perder sus viviendas. Así, explica que "la gente no puede hacer frente a casi nada, ni impuestos municipales ni suministros de electricidad", y aclara que si cuentan con una paga de 400 euros, "llegan casi a dejar de comer hasta que literalmente tienen que elegir entre comer y pagar". Blázquez destaca que las deudas con el Ayuntamiento son solo "un problema más" de estos hogares y señala que para algunos, "las dificultades en lugar de relajarse se incrementan".