El presidente de la mancomunidad de juntas de compensación Alamiriya, Manuel Sánchez, celebra «con ilusión» la propuesta. Sanchez recuerda «la moción aprobada por unanimidad en el 2015» que «cayó en saco roto», por lo que espera que «la propuesta siga adelante y se consiga acceder a los servicios básicos, no solo agua potable, sino también saneamiento, luz y transporte, ya que pagamos impuestos como cualquier cordobés que posee todos estos servicios de los que carecemos».

El presidente de la junta de compensación El Sol, José Luis Vega, se mostró satisfecho y sorprendido, ya que le parece «estupendo» que Urbanismo tenga esta iniciativa pero le llama la atención que «sea capaz de dar una solución a los servicios básicos y nosotros, en suelo consolidado, tengamos problemas», lo que cree un «agravio comparativo». Vega lamenta que «el Ayuntamiento no nos ha ayudado nada». El Sol proviene del PGOU del 86, está calificada en el vigente como suelo urbano, tiene su plan aprobado desde el 2001 y junta de compensación desde el 2003. La parcelación presentó en el 2004 en Urbanismo el proyecto de urbanización y en el 2008 fue aprobado de forma inicial el de reparcelación y ahora su «caballo de batalla es la CHG, la delimitación del dominio público hidráulico».

El presidente de Cuevas de Altázar, José Manuel León, considera «un paso importante» la idea y que se flexibilicen las medidas, aunque las juntas de compensación deben adquirir compromisos. León piensa que «el agua y la luz no se le debe negar a nadie».