La emoción del desorden, el caos, la felicidad a través de las prendas, el cariño que desprenden las cosas... Son muchos los conceptos que maneja la japonesa Marie Kondo en su método, donde la organización parece dar la felicidad. «Solo cuando te enfrentas a todo lo que tienes, te das cuenta de lo que necesitas», dice. Después de vender felicidad en libros como La magia del orden y La felicidad después del orden, y tras acumular millones de visitas en su canal de YouTube y sus redes sociales, esta experta en el arte de organizar, de 34 años, acaba de llegar a Netflix.

La plataforma de pago ha elegido el comienzo del año, dado a la declaración de buenas intenciones, para estrenar la primera temporada de ¡A ordenar con Marie Kondo!, un espacio en el que la gurú del orden ayuda a familias estadounidenses e individuos solitarios a organizar sus casas y, en consecuencia, sus vidas.

A lo largo de ocho capítulos, Kondo interacciona con personas que se han visto muy afectadas por el caos y el desorden y les ofrece consejos para mejorarles su situación emocional a través del orden. Así, explica cómo guardar la ropa de manera que quepa en el mínimo espacio (y sin arrugar), cómo archivar las cosas de forma que queden siempre a la vista, o cómo estimar el valor que tiene cada objeto y qué lugar debe ocupar.

La nueva vida que propone la experta pasa por deshacernos de todo lo que no aporta energías positivas. Pero recomienda hacerlo con mucho cariño. Según Kondo, no puedes desprenderte de las cosas de cualquier forma, sino que debes agradecerles que pasaran por tu vida, aunque sea una camiseta del bar de la esquina que ya solo usas para limpiar.

En la serie, Kondo explica que, para ordenar, primero hay que desordenar. ¿Cómo? En varios episodios anima a tirarlo todo en un mismo espacio, por ejemplo una cama, y a partir de ahí decidir cuál es el destino que debe tener cada prenda, sin olvidar nunca darle las gracias por haber existido. Según su experiencia, no es aconsejable ordenar las cosas poco a poco, sino hacer de inicio una limpieza a fondo en la que debemos desprendernos de todo lo que no debería tener lugar en la casa.

Ante el reto de tirar, la experta recomienda empezar por lo que se tenga claro. Hay objetos de valor sentimental que serán difíciles de olvidar, así que es mejor centrarse primero en lo que es claramente descartable. «No se trata de obligarte a quitar cosas, sino de confirmar tus sentimientos hacia tus posesiones», advierte. Hay que sentir felicidad cuando se toca o ve un objeto. Si no se siente, su destino es el cubo de basura. En cuestión de libros, Kondo tiene una máxima: no debe haber más de 30 en la casa. Superar esa cifra difícilmente aportará felicidad.

Desprendernos de las posesiones es una labor delicada, así que la maga del orden aconseja llevar a cabo este trabajo en solitario. Nada de ordenar junto a la pareja o en familia, ni de decirle a la otra persona qué gorra debe tirar o dónde ha de guardar la cazadora que no usa desde hace 10 años. Ordenar en solitario, según Kondo, hace que cada uno se preocupe de su propia ropa, sus libros y sus cuestiones sentimentales.

A la hora de ordenar, la japonesa aconseja hacerlo por categorías -ropa, libros, papeles...-, no por ubicación, y siempre compartimentar. Cada cosa debe tener su lugar. Por eso, recomienda disponer de pequeñas cajas dentro de los muebles y que cada vez que se use algo, vuelva luego a ese espacio reducido. También en el armario de la ropa, donde las prendas deben colocarse en vertical. Situarlas por tamaños también ayuda, según explica en la serie, cuyo lanzamiento ha generado multitud de comentarios en las redes sociales, la mayoría en tono de humor e ironía.

Aprender a deshacernos de lo que no sirve, ordenar en lugar de almacenar, buscar la felicidad en los detalles mínimos que hacen que el hogar esté lleno de energía positiva... Visto el método de Kondo, parece que la felicidad solo llega cuando los calcetines están en su sitio. Ordenar tu casa no ordenará tu mente, pero ayudará, dice ella.