Tras el culebrón de la compra de 'Pasapalabra' (todavía sin presentador ni fecha de emisión), Antena 3 sigue sumando concursos a su parrilla, en la que ya figuran títulos como 'La ruleta de la suerte', 'Ahora caigo' y 'Boom!'. Aprovechando el estreno hace 20 años en Gran Bretaña de '¿Quién quiere ser millonario?', la cadena ofrece este miércoles (22.45 horas) el primero de cuatro especiales de un programa que desde su debut no ha dejado de cruzar fronteras, ya que ha sido adaptado en 120 países. Juanra Bonet toma ahora el relevo de Carlos Sobera, Antonio Garrido y Nuria Roca, que estuvieron al frente del 'show' en sus anteriores etapas en España.

"Recuperar el programa es todo un desafío", asegura Bonet, que es consciente de lo mucho que ha cambiado la pequeña pantalla desde que debutara el concurso que inspiró la oscarizada película 'Slumdog Millionaire'. "La tele de ahora es estímulo, ráfagas, música, grafismo, bombas que explotan, trampillas que se abren, jurados que hacen juicios muy locos..." enumera. "Esto es todo lo contrario: dos personas mirándose, una de ellas pensando y otra intentando que se aclare. Va a ser un oasis en la tele, pero con mucha tensión, porque aquí no hay interferencias", recalca.

Las interferencias tampoco vienen del presentador, que él considera que en el 'millonario' siempre está supeditado al formato, "que es historia de la tele, como un coche clásico que no puedes tunear", y al concursante. "El presentador es un espejo en el que se mira el concursante, que a veces necesita un Pepito Grillo y otras un colega", subraya. Aunque reconoce la impronta que le dio Sobera, "el padre" del concurso en España, que lo inauguró en 1999 en Tele 5 y luego se mudó con él a Antena 3 desde el 2005 al 2008. Su característica forma de levantar la ceja fue uno de los sellos del 'show'. "Y es inimitable", asegura Bonet.

Nuevo comodín

El programa mantiene su dinámica habitual, con 15 preguntas con las que los participantes pueden embolsarse un millón de euros y con tres comodines de apoyo, el del 50%, el del público y el del familiar, que sustituye al tradicional de la llamada. Otra de las particularidades de estos especiales es que los participantes son unos expertos en eso de responder preguntas, ya que han ganado en programas como 'Saber y ganar', 'Boom', el propio '¿Quién quiere ser millonario?' y 'Pasapalabra', del que Bonet sigue en las quinielas como posible presentador, algo que él ni confirma ni desmiente. "El programa está recién adquirido y esas cosas se cuecen a fuego lento", justifica. "Pero estar en las quinielas me da mucha alegría y a mi gestor, mucha tranquilidad", bromea él, que sabe un rato de concursos.

Lleva desde el 2014 al frente de 'Boom!', afianzado en las tardes de Antena 3, que batió récords el pasado julio con la entrega del mayor bote en la historia de la televisión, 6,6 millones de euros que se llevó el equipo de Los Lobos. Sin embargo, ni la experiencia adquirida en ese programa ni en '¿Quién quiere ser millonario?' le sirven para ganar al Trivial. "Soy malísimo. Ojalá fuera distinto, pero no he aprendido nada de cultura general porque no tengo tiempo de preocuparme por eso. Estoy pendiente de tantas cosas, de los concursantes, de la posición de las cámaras, del público, de los focos, del ritmo, que no tengo tiempo de jugar".