El segundo y último debate a cuatro en televisión, que ofreció este martes, 23 de abril, el grupo privado Atresmedia, levantó más expectación que el que ofreció el lunes, 22, el grupo estatal RTVE (8.886.000 personas y un 43,8%). Pero aún y así, ha quedado lejos de los especiales electorales que se han emitido en la pequeña pantalla desde 1992 (año en el que se implantaron los audímetros para el control de las audiencias).

Según un informe de Barlovento Comunicación, elaborado con datos de Kantar Media, el debate que ofrecieron simultáneamente Antena 3 y La Sexta congregó a una media de 9.477.000 espectadores, lo que representa un importante 48,7% de cuota.Es decir, que casi la mitad de los españoles que el martes por la noche estaban ante el televisor, seguían la emisión del debate. O bien lo vieron por A-3 (5.283.000 personas), o bien por La Sexta (4.194.000).

Con esta audiencia, el debate fue la gran estrella del día en televisión. Pero, a pesar de su indudable éxito mediático, queda lejos de los 13.043.000 espectadores de media que logró en el 2008 el cara a cara entre Mariano Rajoy y José Luis Rodríguez Zapatero. Eso sí, estas más de 13 millones de personas se lograron con la suma de las 20 cadenas que emitieron simultáneamente la señal que ofreció la Academia de la Televisión, que fue quien organizó este especial.

De hecho, este especial de Atresmedia aparece como el octavo más visto en los debates políticos emitidos en España, si bien en esta clasificación todos son cara a cara, a excepción del debate, también a cuatro (Rajoy, Sánchez, Rivera e Iglesias) que en junio del 2016 emitieron simultáneamente 17 cadenas, y que congregó a una media de 10.496.000 personas (57% de cuota). En este caso, también organizó el debate la Academia de la Televisión.