Los padres del joven que murió el pasado 8 de noviembre víctima de una reyerta en Las Moreras negaron ayer ser autores de las lesiones que presentan los dos individuos que están en prisión, uno de ellos autor confeso del apuñalamiento mortal. Los progenitores del fallecido comparecieron ayer ante la jueza de Instrucción número 6 en calidad de investigados por los hechos, ya que la defensa de los dos encarcelados sostiene que tanto la herida en el brazo provocada por una catana que presenta uno de ellos, como la puñalada en la cara que sufre el otro, fueron realizadas por el matrimonio. Sin embargo, ambos negaron ayer los hechos y también mantuvieron que su hijo fallecido no portaba arma blanca alguna que pudiera haber producido las lesiones.

El abogado defensor de los acusados va a solicitar a un laboratorio de informática el tratamiento de las imágenes del vídeo que recoge cómo se desarrollaron los hechos en el patio Gabriel Celaya de Las Moreras para demostrar, según su versión, la implicación de los padres del joven apuñalado.

El pasado 5 de diciembre ya fueron llamados a declarar y durante el interrogatorio la mujer reconoció que entre ella y la entonces detenida (madre del autor confeso del apuñalamiento mortal) no medió ningún arma, sino que su discusión consistió en forcejeos y golpes. Ante esta situación y por petición de la defensa de la encarcelada, el juez accedió a decretar la orden de libertad, previo pago de una fianza fijada en 3.000 euros. Además, la investigada deberá presentarse en el juzgado los días 1 y 17 de cada mes. Dictó también una orden por medio de la cual no podrá acercarse a menos de 150 metros de la familia del joven fallecido.

La Policía también aportó como prueba una relación de llamadas formuladas por la esposa del autor, en la que se recoge que la citada joven hizo varias llamadas pidiendo ayuda por los hechos que estaban sucediendo.