Los bomberos de Córdoba se tuvieron que emplear a fondo durante la madrugada del viernes para extinguir un incendio que arrasado unas 250 hectáreas de terreno de cultivo junto a la carretera N-432.

Segun informó el Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS), el fuego se inició sobre las once menos diez de la noche del jueves en una zona próxima a la citada carretera, a la altura del kilómetro 281, y dadas las proporciones de la zona afectada se tuvo que desplazar un amplio despliegue de efectivos y medios técnicos, que consiguieron dar por extinguidas las llamas sobre las cinco de la madrugada.

El incendio fue adquiriendo tales proporciones que provocó que se tuvieran que buscar recursos humanos más allá de los que estaban de servicio, lo que ha generado críticas de los bomberos por la falta de personal, que han señalado que no es la primera vez que cuando ocurre un suceso de cierta envergadura los parques de bomberos de la ciudad se quedan prácticamente vacíos.

Al respecto, Emilio Aumente, responsable de Seguridad del Ayuntamiento, indicó que en la misma noche del jueves se dieron unas circunstancias especiales, como el hecho de surgir otro conato en el centro de reciclado de Sadeco y la quema de dos contenedores en la ciudad, lo que hizo que todo el personal estuviera ocupado. A ello se unió el fuerte viento que se levantó y que ayudó a que se propagaran las llamas.

Por otro lado, Emilio Aumente indicó que el fuego pudo tener su origen en una quema de rastrojos, actividad que está prohibida en la temporada de verano, como todas aquellas que supongan el uso del fuego en el campo. De confirmarse este extremo, el concejal señaló que el responsable del suceso de podría enfrentar a una sanción porque «hubo un abandono bastante importante por parte de los responsables de la quema».