La Guardia Civil investiga un vertido detectado ayer en el río Cabra a su paso por el término municipal de Monturque que, según recoge la denuncia presentada, podría estar relacionada con alguna de las empresas agroindustriales de la zona. En concreto, cerca de la zona de Vado Castro, el agua presentaba ayer «un olor, color y espuma propios de un vertido de sosa cáustica».

«No es la primera vez que se produce un vertido de este tipo en esta zona que, por lo general, coincide con los días previos a una previsión de lluvias», explicó ayer el denunciante, Victorio Domínguez, quien señaló que este caso ha sido detectado gracias a la colaboración ciudadana, que alertó de la presencia de aguas negras en el río.

En este sentido, Domínguez lamenta que «lamentablemente este vertido no es un caso aislado», pues ya a primeros de año se detectó un hecho similar, «aunque en aquella ocasión no se realizó la pertinente denuncia».

«Se trata de una situación grave porque no solo afecta a la flora, sino a un río que tiene una importante fauna de peces, galápagos y tortugas que fallecen», explicó Domínguez que, a su vez, solicitó un mayor control por parte de la Administración.

Precisamente, en el año 2015 Ecologistas en Acción ya denunció un vertido de sosa al cauce del río Cabra que provocó la muerte de peces en las aguas de este río. También las administraciones han estado estudiando varios casos de empresas particulares, como en el 2011.

El río Cabra sufre en su tramo alto problemas como la acumulación de vertidos y basuras, la pérdida de calidad de las aguas, la erosión y desestabilización del cauce y sus márgenes, una grave degradación de la vegetación y la desconexión del medio fluvial con el entorno urbano, agrícola e industrial.