Un hombre ha sido condenado a dos años de cárcel por abusos sexuales a su nieta, a indemnizarla con 3.000 euros y la prohibición de acercarse a ella a menos de 300 metros durante cinco años.

Debido a la enfermedad que padece el acusado, la condena ha sido suspendida, aplicándose también la atenuante de la reparación del daño al indemnizar a la perjudicada. El acusado reconoció ante el juez los hechos, tras lo que se llegó a un acuerdo entre las partes.

Según recoge la calificación del Ministerio Público, los hechos ocurrieron en Córdoba, entre los meses de mayo y junio del 2017, cuando la menor, de 12 años de edad en aquel momento, se encontraba en casa de su abuelo paterno, donde también residía su padre. En una ocasión, el abuelo, octogenario, realizó tocamientos en los pechos a la pequeña, y, días después, mientras la niña se encontraba estudiando, introdujo la mano en los genitales de la menor. Unas dos semanas después la menor relató lo sucedido a la madre, que, junto al padre, denunciaron los hechos, aunque posteriormente el padre retiró de la denuncia.

La Fiscalía pedía para el acusado una pena de cuatro años de cárcel y una prohibición de acercarse a su nieta o al domicilio de ocho años.