Durante la presentación del decreto de los VTC, el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, ha asegurado que “ni este sector ni el taxi podrán decir que han ganado”. Una afirmación que la reacción de ambos bandos pone en entredicho. Mientras los taxistas se esfuerzan en destacar los aspectos positivos del decreto, desde el otro lado no pueden reprimir su irritación.

“El Gobierno cede claramente al chantaje del sector del taxi”, ha escrito en un comunicado Unauto, la patronal que agrupa a las empresas que trabajan con las plataformas Uber y Cabify. Para la asociación, se trata de “un decreto lío” que en vez de resolver la guerra entre las VTC y el taxi, “la potenciará y multiplicará por 17 (las autonomías)”.

No se quedan ahí sus críticas. También sostienen que el decreto creará inseguridad jurídica “a los trabajadores y autónomos de las plataformas, haciendo ir atrás a España”.

ABANDONO DE LICENCIAS

Algo de razón deben llevar porque los taxistas creen que el decreto puede hacer incluso innecesario que dentro de cuatro años se retiren licencias. “Al facultar a los ayuntamientos para que regulen los VTC al igual que al taxi ellos mismos abandonarán las licencias, porque no les serán rentables. Son empresas que se basan en la especulación y en jugar con ventaja en el mercado”. Quién lo dice es Tito Álvarez, el portavoz de Élite, el sindicato que suma más del 80% de los apoyos en Barcelona.

Álvarez habla a título personal, porque será la asamblea de su organización la que se pronuncie la próxima semana, pero no puede dejar de recordar que en julio tenían “una resolución judicial que echó por tierra” sus ilusiones y que con la huelga indefinida del verano han conseguido que los VTC puedan ser sometidos a una regulación que les permita competir en condiciones de igualdad.

La posición de los sindicatos de taxistas será clave, dado que Podemos ya ha avanzado que su voto se guiará por lo que el sector decida. Para que el real decreto no sea suspendido, requiere la convalidación del Congreso. Fomento ha mantenido ya encuentros “positivos” con los grupos que apoyaron la moción de censura del Pedro Sánchez.