La Comisión Europea ha publicado la edición de 2018 del Monitor de Educación y Formación, que muestra que los Estados miembros han avanzado hacia las metas de la UE fijadas para el 2020. España tiene por delante un desafío regional por eliminar las desigualdades entre Comunidades Autónomas y sigue estando lejos del aprobado en la reducción del abandono escolar y en el acceso al empleo de los jóvenes graduados. Otro dato que se extrae del informe es que las mujeres son “mejores alumnas” que los hombres, en España y en Europa.

"Me complace ver que los Estados miembros están trabajando duramente para cumplir los objetivos acordados en educación para el 2020 y para permitir que los jóvenes se conviertan en miembros comprometidos de nuestras comunidades”, ha dicho Tibor Navracsics, Comisario de Educación de la UE.

A grandes rasgos, en la Unión Europea cada vez hay menos casos de abandono escolar, más estudiantes se gradúan en estudios superiores y el gasto en educación aumenta, mintiéndose en la cuarta partida más grande en los presupuestos de los Estados miembros, después de la Seguridad Social, la Sanidad y los Servicios Públicos. Sin embargo, el informe pone de manifiesto que se necesitan más reformas en materia educativa, sobre todo enfocadas a reducir las diferencias dentro de los países y entre ellos.

Suspensos y aprobados

España es uno de los países que más tiene que trabajar para alcanzar el objetivo de la UE de reducir al 10% la tasa de abandono de la educación y la formación. En el Monitor, nuestro país se sitúa ocho puntos porcentuales por debajo de la media europea con una tasa del 18.3% frente al 10.6% de la UE. Los hombres son los que más abandonan, casi el 22%, siete puntos por encima de las mujeres.

Según el informe, si bien hay “un buen progreso en la reducción del abandono escolar prematuro” en España, las tasas aún varían entre las regiones y el problema de la repetición de grado persiste. En lo que a la educación superior respecta, las tasas de abandono inicial siguen siendo altas y a nuestros estudiantes les cuesta terminar sus grados universitarios.

El segundo suspenso no es un secreto para nadie, en España la proporción de jóvenes (entre 20 y 34 años) que encuentran empleo durante los tres años siguientes a graduarse se sitúa en un 71.9%, todavía lejos del objetivo del 80% fijado por la UE para el 2020 y de la media europea, que ya alcanza el 80,2%. Si hablamos de lectura, los españoles se acercan poco a poco al objetivo de reducir al 15% la tasa de bajo rendimiento, aunque las cifras en ciencias (22.2%) y matemáticas (18.3%) demuestran que necesitamos refuerzo en las asignaturas que no son “de letras”.

Pero no todo son malas noticias, España tiene un sobresaliente en la tasa de participación en educación infantil: El 97.3% de los niños entre 4 años y la edad para comenzar la educación primaria van a escuelas infantiles, por encima de la media del 95.3% y del objetivo del 95%.

Además, la proporción de jóvenes de 30 a 34 años que cuentan con estudios superiores se sitúa en el 41.2%, por encima de la media del 39.9% y del objetivo del 40%. Mención especial a las mujeres: casi la mitad de ellas (el 47.5%) tienen estudios superiores sobrepasando por mucho a sus compañeros varones (34.8%). Lo curioso es que, a pesar de los buenos resultados, la cifra conjunta de este año ha descendido con respecto a la del año anterior.

A medias tintas

Existen otros aspectos de la educación en España que se quedan a medias tintas entre el aprobado y el suspenso. El gasto en educación se mantiene estable, pero por debajo de la media de la UE, aunque cabe destacar que el en presupuesto de 2018 aumenta la partida para becas de estudios.

El informe también destaca un mayor esfuerzo en la formación de los docentes de “educación para la ciudadanía” a la hora de abordar temas delicados como racismo y la xenofobia. Sin embargo, esta asignatura sigue sin ser obligatoria y existen diferencias entre las Comunidades Autónomas.

Por último, siguen en curso las iniciativas introducidas en los sistemas de formación profesional tras la reforma de 2015 para dar respuesta a la baja participación en este campo y a las bajas tasas de empleo.

Felicitaciones a nuestros vecinos

El informe destaca la labor educativa de algunos países para formar jóvenes involucrados con su entorno y promover los valores cívicos de la Unión: El sistema educativo danés realiza un gran esfuerzo por desarrollar la capacidad crítica de sus estudiantes y estos ya se han convertido en un ejemplo de participación en las actividades de su comunidad. Por otro lado, en Francia se ha puesto en marcha un plan tras los atentados terroristas del 2015 para transmitir mediante la enseñanza los valores cívicos y morales de la República.

Cabe destacar también la labor de Eslovenia y Bulgaria por introducir mecanismos de participación para los estudiantes en los consejos escolares, en política local y nacional, así como la insistencia de Suecia en transmitir conocimientos sobre el funcionamiento de las sociedades democráticas.