Un robo a una joyería ocurrido en la ciudad estadounidense de Coral Gables, en el estado de Florida, dejó cuatro muertos, entre ellos los dos sospechosos de ser los ladrones, tras una persecución policial de cerca de 50 kilómetros que terminó en un bulevar de Miramar, al norte de Miami, según medios locales.

Imágenes de televisión en vivo mostraron una lluvia de balas de varias patrullas policiales contra un camión de mensajería que estaba en un atasco de vehículos en plena hora punta y del que se apoderaron los ladrones junto con su conductor.

Los muertos, según el diariio 'Miami Herald', son los dos sospechosos del robo, el empleado de la empresa de mensajería UPS y el conductor de otro vehículo particular. Las autoridades no han precisado el número de víctimas y se han limitado a informar de que no hay agentes policiales entre los fallecidos.

Muere un chofer de UPS

Testigos del suceso se mostraron indignados en las redes sociales por el riesgo que supuso el tiroteo no solo para el empleado de UPS que perdió la vida, sino para gran cantidad de conductores y sus familias en plena hora punta, además de para los transeúntes.

Al final de la persecución, desarrollada a lo largo de los condados de Miami-Dade y Broward, donde terminó, los ladrones se apoderaron del camión de mensajería, que fue blanco de los disparos de la policía. Las imágenes de televisión mostraban a un hombre intentando salir del camión del lado del pasajero durante el tiroteo, pero no se sabe si era un empleado de UPS o uno de los sospechosos.

En el bulevar, que fue cerrado por las autoridades, resultaron heridas al menos tres personas, de las cuales una fue aerotransportada a un centro hospitalario y las otras dos rehusaron serlo al considerar que sufrían lesiones menores, informaron medios locales.