El niño alemán de seis años que huyó del ataque en el que supuestamente su padre asesinó a su madre y a su hermano de 10 años, cuyos cadáveres fueron encontrados en una cueva del municipio de Adeje (Tenerife), regresó ayer a Alemania. Fuentes del Cabildo de Tenerife informaron de que el pequeño, que se encontraba en un centro de menores de esta institución, viajaría desde Tenerife acompañado de un sacerdote alemán autorizado por la familia.

El Gobierno de Canarias sigue manteniendo la tutela del niño ya que ningún familiar se ha desplazado a la isla desde Alemania, aunque un sacerdote lo ha visitado con autorización judicial y de la familia.

El menor vuelve a Alemania después de que el pasado lunes la titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Arona (Tenerife) grabara su testimonio, que llevó a la detención de su padre.

El pasado 23 de abril, el pequeño consiguió escapar de la cueva a la que su padre los llevó durante una excursión y en la que presuntamente golpeó con piedras a su madre y a su hermano hasta darles muerte. Según ha relatado la vecina que actuó de traductora, el niño contó que su padre había preparado un picnic por la zona alta de Adeje y les dijo que tenía escondidos en una cueva regalos de Pascua.