Que la ley llegue donde sucumbe el sentido común. Las autoridades del estado indio de Goa diseminarán señales que prohíben las autofotos tras varias muertes causadas por la insensata vanidad de los turistas. Las señales estarán acompañadas de banderas rojas en 24 puntos de uno de los principales destinos de India. El desencadenante fue un vídeo viral de dos semanas atrás. Una chica y dos chicos del estado de Tamil Nadu se fotografían durante un amanecer plácido frente al mar hasta que una ola gigante rompe contra el risco y los engulle. Un amigo que filmaba la escena estaba sentado bajo una señal de peligro. Y en otro incidente similar, cuatro turistas del mismo estado fueron arrastrados por una ola cuando posaban sobre un promontorio. «La indiferencia a las alertas ya tiene un coste muy alto. También influye el escaso conocimiento del mar y la falta de cultura sobre la seguridad en la playa», ha explicado Ravi Shanker, jefe del cuerpo de salvavidas en Goa, al diario local Indian Express. Las playas de arena blanca y prístinas aguas de Goa atraen a seis millones de turistas anuales y el grueso son indios, muchos de ellos de provincias interiores que se asoman al océano por primera vez. Otras razones apuntadas por Shanker son el exceso del alcohol y las ansias de ellos por impresionarlas a ellas con sus dotes nadadoras.

Las víctimas mortales se han multiplicado con las aguas convulsas de la época de los monzones (del 31 de mayo al 31 de septiembre). Cinco jóvenes indios de un grupo de 14 murieron ahogados en las fuertes corrientes en una zona donde estaba prohibido nadar mientras sus compañeros les tomaban fotos. Otro joven falleció tras caer de una torre cuando se retrataba con su teléfono a finales del mes pasado. Se espera que los turistas atiendan más a las señales que a los socorristas. Algunos han sido abroncados e incluso apalizados por los turistas a los que habían desaconsejado adentrarse en los peñascos resbaladizos con sus palos para selfies. Las cifras de rescates sugieren una actividad febril: 1.653 en un lustro (1.285 indios y 368 extranjeros). En este año ya se cuentan 73 locales salvados en áreas de acceso prohibido.

Las estadísticas revelan que más de dos tercios de las víctimas de los selfies son menores de 21 años, según la organización estadounidense Priceonomics.