Los Mossos han detenido a un pirómano activo desde el 2014 después de provocar un incendio Sant Boi de Llobregat (Barcelona) donde no había superado una entrevista de trabajo. El hombre ha ingresado en prisión.

Según han informado los Mossos, sobre las 18.00 horas del 15 de mayo se declaró un incendio en un cine del municipio del Baix Llobregat. La rápida actuación de los propios trabajadores del cine les permitió extinguir el incendio antes de que cogiera mayores proporciones. A continuación, los bomberos determinaron que el incendio había sido intencionado.

En relación con este incendio, los investigadores vieron que el mismo cine, hacia el mediodía, ya había sufrido otra tentativa de incendio, de menor envergadura.

Los investigadores comenzaron a indagar sobre las personas presentes en el cine en los momentos previos a los incendios y pusieron especial atención en el hecho de que, en ambos casos, entre los presentes había un hombre que, poco tiempo antes, no había superado una entrevista de trabajo en esa misma empresa. Por lo tanto, la venganza podría ser el móvil del incendio.

MUY ACTIVO

Posteriormente, los agentes averiguaron que el mismo hombre que investigaban, el día anterior al incendio del cine era atendido por los servicios de emergencia cuando estaba presente en un incendio en una empresa donde trabajaba El Prat de Llobregat. Y el día 16 de mayo, el siguiente del incendio del cine, mientras esperaba a ser visitado en un hospital de la misma ciudad, había intentado quemar y hacer desperfectos en bienes del pasillo de urgencias del hospital.

Además, pocas horas después del mismo 16 de mayo, se declaró un conato de incendio en el mismo bloque de viviendas donde residía el hombre investigado, por lo que la Policía Local de Sant Boi de Llobregat lo trasladó al servicio de urgencias de psiquiatría del Hospital de Sant Boi para su valoración.

La investigación mostró que desde el 2014 el hombre estaba involucrado en varios incendios en Barcelona y su área metropolitana: un domicilio particular en Montcada i Reixac, un céntrico hotel de la capital catalana, e incluso, en las oficinas de un partido político en Barcelona.

El día siguiente a la detención, pasó a disposición judicial y el juez decretó su ingreso en prisión.