Un niño de dos años murió ayer ahogado tras caer accidentalmente a una piscina en Belén, una pedanía de la localidad cacereña de Trujillo. El siniestro ocurrió sobre las 14,30 horas en la calle Real de la citada localidad, hasta donde se desplazaron los equipos de emergencias, que pese a realizar las maniobras de reanimación no pudieron salvarle la vida. Al lugar se envió también un helicóptero sanitario del Servicio Extremeño de Salud y un equipo médico del Punto de Atención Continuada de Trujillo.