Un paciente sordo de Almería ha denunciado mediante un vídeo en redes sociales que estuvo esperando casi siete horas en el servicio de Urgencias del Hospital Torrecárdenas y se tuvo que marchar sin lograr que le atendieran. El episodio sería similar a otros que se suceden en época estival en cualquier centro, si no fuera porque el hombre avisó de que padecía una discapacidad auditiva y, no obstante, le estuvieron llamando por megafonía.

El vídeo ha servido al colectivo Marea Blanca de Almería para denunciar la necesidad de que los servicios públicos “estén adaptados a las personas con diversidad funcional o sensorial”, por lo que reclaman a los responsables del complejo almeriense que pongan todos los medios necesarios para evitar situaciones como esta y cumplir con la legalidad.

El paciente, Juan, explica en la grabación mediante lenguaje de signos y carteles que llegó al hospital almeriense en torno a las 11.00 horas del sábado 26 de julio por un fuerte dolor e inflamación, tras haber sido operado recientemente de un pie a causa de una diabetes. Una vez allí, alertó de inmediato al personal de información de que era sordo, para que lo tuvieran en cuenta una vez que entrara en la sala de espera y pudieran avisarle de forma adecuada.

“Me he tirado hasta las 17.30 horas y no ha venido nadie porque me llamaban por el altavoz, por lo que he tenido que volver a mi casa sin ser atendido durante casi siete horas”, escribió en los carteles, por lo que ha decidido presentar una reclamación.

El vídeo incluye la petición del paciente para que su petición se viralice y “llegue a donde tenga que llegar para que los hospitales sean adaptados a las personas sordas”. “Por favor, que no nos llamen por altavoces, acérquense a nosotros y tóquennos", reclama en la grabación a los médicos y los enfermeros. El enfermo concluye mostrando la inflamación de su extremidad y pidiendo también a la presidenta de la Junta de Andalucía Susana Díaz que “adapte los hospitales para las personas minusválidas y sordas” a fin de que haya una “igualdad real y sin barreras”.