Alrededor del 80% del salmón de granja de todo el mundo que cuenta con un certificado ecológico procede de piscifactorías, pero no todas ellas, ni mucho menos, siguen con las normas estipuladas para obtener tal certificación. Un estudio de la oenegé SeaChoice sostiene que ocho de cada 10 de estas empresas no cumplen los criterios estipulados como eco-friendly por el Aquaculture Stewardship Council (ASC). La autora principal del informe y representante de SeaChoice de Living Oceans Society, Kelly Roebuck, ha denunciado la falta de rigor que conlleva el desengaño de los consumidores: «Solo alrededor del 20% de las granjas de salmón de todo el mundo siguen los criterios tal como están escritos. La gente no está obteniendo lo que cree que está obteniendo con la etiqueta».

257 GRANJAS / Noruega, Australia, Canadá, Chile y Escocia, han sido los principales países de estudio desde su primera certificación en 2014 hasta el 15 de marzo del 2018. Este estudio de ámbito global, llamado Global Review of the Aquaculture Stewardship Council’s Salmon Standard, es el primero que examina el nivel de respeto a la Norma para el Salmón del ASC por parte de 257 granjas en las principales regiones de cría de salmón.

La mayor cría de salmón se encuentra en Chile, considerada una de las principales regiones de crianza, pues produce el 31% de todo el salmón certificado que se vende en el mundo. A la vez, las piscifactorías chilenas lideran el ranquin de incumplimiento de auditoría de la norma eco, con 3,8 graves y 9,3 leves. El alto uso de antibióticos o un gran evento de escape -por ejemplo: cuatro piscifactorías empleaban más tratamientos antibióticos de los permitidos por la norma; una granja sufrió alrededor de 10.000 escapes- es uno de los criterios infringidos, que la investigación ha revelado, con los que las piscifactorías mantenían su certificación. Además, ninguna de las granjas contaba con un acuerdo de gestión por superficie que cumpliese plenamente todos los requisitos. Por otro lado se ha observado el uso de parasiticidas (sustancias químicas contra los piojos de mar) en las piscifactorías certificada. Por su lado, aunque lideran el ranquin de incumplimiento, las granjas chilenas sí cumplen debidamente los coeficientes de dependencia alimentaria piscícola establecidos por la norma.

El consumo medio anual de salmón en la UE, si bien varía de un país a otro, es de 2 kg/cápita. Francia se sitúa como el mayor mercado consumidor seguido de Alemania y Reino Unido. Italia, España, Suecia, Países Bajos y Polonia son también, por ese orden, grandes consumidores.