Una violenta agresión con arma blanca provocó ayer al menos un muerto y nueve heridos, tres de ellos graves, cerca de Lyon, según informó la prefectura de la región de Ródano. El ataque fue cometido con un cuchillo de cocina por un joven afgano solicitante de asilo que no estaba fichado, según medios locales. La presencia de un segundo individuo que habría logrado huir de la policía no ha sido confirmada oficialmente.

Los hechos se produjeron sobre las 16.30 horas en la localidad de Villeurbane, concretamente en la estación de metro de Laurent-Bonnevay. Varias líneas de autobús y de metro se cerrarom para permitir la actuación de las fuerzas del orden y hasta la zona se desplazaron militares y agentes de la unidad de élite de la policía francesa (Raid) así como unos 30 bomberos para prestar asistencia a las víctimas del ataque. El fallecido es un joven de 19 años.

Según un testigo directo citado por Le Progrès de Lyon, el sospechoso estaba armado con un pincho grande de cocina y un cuchillo de barbacoa y se puso a agredir a varias personas que estaban en la parada del autobús.

La compañía de transportes de la región (TCL) ha indicado que el atacante fue neutralizado por cuatro conductores de autobús que lo mantuvieron retenido hasta que llegaron las fuerzas del orden. Ningún conductor resultó herido. El alcalde de Lyon y ex ministro del Interior, Gérard Collomb, se trasladó hasta el lugar de la agresión y declaró que no se sabe nada sobre las motivaciones del agresor. «Lo que está claro es que no se trataba de una reyerta, porque era alguien que atacó de manera indiscriminada a los pasajeros que esperaban un autobus», indicó. Según el ministerio del Interior, el detenido dio tres nombres diferentes a los policías y no llevaba ningún tipo de documentación encima. La Fiscalía Antiterrorista sigue de cerca la situación, aunque no ha asumido la investigación,