Un niño de tres años de Aínsa (Huesca) murió el domingo al ser atropellado por el coche con el que maniobraba su madre en un parking de la localidad tarraconense de Montblanc, quien no se percató de la presencia del pequeño. Al lugar del suceso se trasladaron dos ambulancias y un helicóptero, cuyos efectivos no pudieron hacer nada por salva al niño. El accidente tuvo lugar en el aparcamiento de Sant Miquel, ubicado en el centro de la ciudad, cuando la madre maniobraba con el coche, un todoterreno que se había estropeado y que la mujer intentaba subir a una grúa.