El bebé de dos meses que ingresó en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona el viernes 4 de enero tras haber sido maltratado ha muerto este lunes a las 14.15 horas, ha informado el centro médico en un comunicado.

El niño estaba en estado de coma inducido, enchufado a una máquina con derrame cerebral, desprendimiento de retina y otros daños.

El bebé ingresó porque sufría un hematoma en la cabeza, tenía un brazo fracturado y también "cinco costillas rotas con callo", lo que indicaba signos de maltratos anteriores, explicaron fuentes conocedoras.

A raíz de las sospechas, el equipo médico activó el Protocolo de maltrato infantil de la Generalitat, y el padre acabó por confesar este jueves a los facultativos haber maltratado al pequeño, según fuentes cercanas al caso.

El padre está en libertad provisional con cargos y ha salido del municipio.

El niño había sido atendido previamente en el hospital de Calella sin que los profesionales detectaran el maltrato ni lesiones previas, y atribuyeron los lloros a cólidos del lactante, según explicó la madre del pequeño a este diario.