Puan, el orangután más viejo del mundo, falleció el pasado martes en el zoológico de Perth (Australia) a la edad de 62 años. Como legado deja 11 crías y 54 descendientes que han contribuido a propagar por todo el mundo una especie en peligro de extinción.

«Puan -que significa dama en indonesio- ha hecho mucho por la colonia del zoo y por la supervivencia de la especie de los orangutanes de Sumatra», subrayó agradecida Holly Thompson, directora de los primates de la instalación. Nacida en 1956, ingresó al Libro Guinness de los Récords como el orangután más antiguo del mundo. En la naturaleza, las hembras rara vez viven más allá de los 50 años.

Según Thompson, Puan tenía una personalidad independiente y una actitud distante. «Sabíamos qué hacer con Puan, y si ella no estaba feliz, simplemente daba pataditas con el pie», recuerda con cierta melancolía.