La localidad de Montoro volvió a ser ayer el lugar más caluroso de España al marcar la mayor temperatura del país con 44,7 grados, según los datos publicados por la Agencia Estatal de Meteorología. El tercer puesto fue para Córdoba, con 42,6 grados, colándose en segundo lugar la localidad cacereña de Trujillo, con 42,7.

Durante los próximos seis días la ola de calor dejará temperaturas extremas en la Península y Baleares, con valores que llegarán hasta los 40 grados, aunque en zonas del sur, centro y valle del Ebro se superarán esos valores, que estarán entre 5 y 10 grados por encima de los normales para esta época del año.

Tras un mes de julio con temperaturas suaves, esta ola de calor se extenderá hasta el lunes con anomalías también en la temperaturas mínimas, que estarán en general por encima de la media con entre 3 y 5 grados en la mitad oriental y entre 5 y 10 grados en la occidental de la Península, explicó la Agencia Estatal de Meteorología.

Esta ola de calor llega después de jornadas de precipitaciones en el norte peninsular y se debe a la estabilidad meteorológica que «favorece el fuerte calentamiento de la masa de aire» y permanecerá durante varios días, explicó el portavoz de la Aemet, Rubén del Campo, en un comunicado del Ministerio para la Transición Ecológica. Del Campo señaló que a ello se suma el cielo despejado o poco nuboso que permite la insolación propia de estos días y la entrada de aire cálido africano. Era ayer cuando se esperaba el ascenso de valores, que hasta la fecha no habían alcanzado cifras extremas en ninguna de las variables registradas en los observatorios. Por ejemplo, Córdoba tuvo ayer una temperatura máxima de 42,7 grados y 20,3 grados de mínima.

La Agencia ha activado para hoy jueves alertas roja, naranja y amarilla en cuarenta provincias de trece comunidades autónomas, siendo Badajoz la provincia que estará con aviso rojo y riesgo extremo por temperaturas, que llegarán a los 44 grados.

El ascenso de los termómetros se registrará en gran parte de la Península, y en muchas zonas del sur, centro y valle del Ebro se superarán los cuarenta grados. En áreas de los valles del Tajo, Guadiana y Guadalquivir se superarán esos valores, mientras en la meseta norte y el sur de Galicia se alcanzarán o superarán los 39 o 40 grados. A partir de mañana viernes, se alcanzarán o sobrepasarán los 35 grados incluso en zonas poco habituales, como el área cantábrica y el litoral catalán, según Del Campo, y solo la costa de Andalucía oriental, Ceuta, Melilla y Canarias quedarán fuera del mapa de altas temperaturas.

El portavoz de la Aemet ha advertido que la mínimas serán también anormalmente altas en la Península y Baleares, y no bajarán de los 25 grados en amplias áreas del cuadrante suroccidental peninsular. Por tanto, el mapa por riesgo de incendios es elevado, sobre todo en el centro y sur de la Península y en el noreste y zonas de las islas Baleares.

Varias investigaciones científicas señalan que en el futuro las olas de calor serán más frecuentes, intensas y duraderas debidas al cambio climático. Según la Aemet, esta ola de calor llega con cierto retraso con respecto a años anteriores, provocada por un potente anticiclón durante los meses de junio y julio, que ha dejado temperaturas altas en el centro y norte de Europa con tiempo seco inusual para esas regiones.

Los departamentos de sanidad autonómicos recuerdan a los ciudadanos la necesidad de tomar medidas preventivas para evitar que las altas temperaturas tengan un efecto directo en la salud, como beber agua, evitar el ejercicio físico en las horas centrales del día y buscar lugares con sombra o refrigeración.