España destinó en el 2016 la mitad de su gasto en protección social a pagar pensiones de jubilación y viudedad, en concreto el 50,4% del total, una cota superior al 45,6% de media en la Unión Europea (UE), según los datos publicados ayer por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat. El gasto total en prestaciones sociales en España representó ese año casi un cuarto de su PIB (24%), tres décimas menos que en 2015. Esto le sitúa ligeramente por debajo de la media de la UE, que fue del 28% del PIB, dos décimas menos que en 2015, y justo en la mitad de la tabla de los 28 países que componen el club comunitario. En cuanto al destino de las ayudas, Tras las pensiones de jubilación y viudedad siguen las prestaciones por enfermedad y discapacidad (34%).