Los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado estiman que más de 1.000 inmigrantes se encuentran en el entorno de Marruecos más próximo a Ceuta para intentar acceder ilegalmente a la ciudad. Fuentes policiales han informado que estos inmigrantes pueden en cualquier momento intentar un asalto masivo en grupo a la valla fronteriza, por lo que se mantiene un control especial sobre la zona. La Guardia Civil cuenta con el apoyo de un helicóptero que realiza vuelos diarios a los 8,2 kilómetros de perímetro fronterizo terrestre para detectar cualquier movimiento sospechoso de personas por el entorno de la doble valla. Desde mediados de agosto no se ha registrado ningún intento de entrada después de que las autoridades marroquíes impidieran el paso por la aduana.