Una mujer de 58 años murió tras recibir 13 puñaladas en la cabeza, un brazo y el pecho en una discusión a causa de ruidos a la hora de la siesta en el portal de un edificio de Alicante por parte de un vecino de 41 años, que fue detenido tras la agresión. También fue arrestado el padre de éste por amenazas graves a la mujer que falleció en el hospital.