Más de 23.000 dominicanos siguen fuera de sus hogares debido a las inundaciones registradas en una buena parte del este y norte del país tras el paso del huracán María, que mantienen a decenas de localidades incomunicadas y cuyos daños aún son evaluados por las autoridades. El número de desplazados a casas de familiares o amigos por el huracán aumentó en las últimas horas de 15.076 a 21.338 básicamente por la crecida del río Yuna, el más caudaloso del país, que inundó varios municipios del noreste y noroeste.

También se registró un aumento en el número de personas en refugios tras pasar de 941 a 2.275, de acuerdo con un boletín del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), que mantiene 23 provincias en alerta, entre ellas varias localidades de las provincias de Montecristi y Duarte en roja (máxima).

El huracán causó un muerto en el norte a causa del derrumbe del techo de una vivienda y otro en el este tras intentar cruzar una cañada desbordada, según fuentes de la de Defensa Civil, pero el COE no incluye en sus estadísticas ambos fallecimientos por considerar que se trata de episodios indirectos.