El Juzgado de lo Social número 25 de Barcelona ha condenado a la empresa de sanitarios Roca a indemnizar con 556.206 euros a la viuda de un trabajador de la fábrica de la compañía en Gavà que falleció en 2017 a raíz de una enfermedad causada por la inhalación de fibras de amianto. En la sentencia, el magistrado considera que ha quedado «perfectamente acreditada» la responsabilidad de Roca en la «enfermedad profesional” del antiguo operario, que trabajó en la planta barcelonesa de la multinacional entre 1970 y 1989. El afectado tenía reconocida desde 1995 una incapacidad permanente absoluta por padecer silicosis pulmonar con severa insuficiencia ventilatoria, diagnóstico que se amplió después de que se detectara en 2017 que sufría un mesotelioma pleural, una patología adquirida por la exposición continua al amianto. El INSS le reconoció la situación de «gran invalidez».