Una pareja víctima del ataque terrorista de Cambrils lleva mes y medio reclamando el dinero que abonó por la reserva de un hotel en Calafell (Baix Penedès) que ni tan siquiera llegó a ocupar. A causa de las heridas, él tuvo que ser operado de urgencia en el Hospital Joan XXIII de Tarragona. Un rifirrafe entre el establecimiento Solimar, Atrápalo, con quien contrataron la habitación, y un proveedor impide a la pareja cobrar los 958,04 euros abonados por una estancia de ocho días, en régimen de alojamiento y desayuno. Después de mucho insistir y aportar todo tipo de documentación tan solo han recuperado la mitad de lo abonado: 470,49 euros. Todavía les falta percibir 487,55 euros porque, según les argumentan, son gastos de cancelación.

Los afectados, además de no recuperar íntegramente la cantidad abonada para la estancia en el hotel, han cobrado a plazos el dinero rescatado. Primero 362,38 euros y posteriormente Atrápalo les comunicó por correo electrónico que «tras insistirle, el hotel ha rebajado los gastos en 108,11 euros».

Nuria F. contrató la estancia en el hotel de tres estrellas para alojarse del 19 al 27 de agosto, pero la madrugada del 17 al 18, cuando salían del Club Nàutic de Cambrils, Rubén G. fue apuñalado por un terrorista. Según consta en el parte médico, ingresó en el hospital de Tarragona a las 4.21 horas de la madrugada del 18 de agosto, donde fue operado de urgencia. La víctima ha estado 17 días ingresada, primero en el centro Joan XXIII y posteriormente en el Vall d’Hebron de Barcelona.

A las pocas horas del ataque terrorista, el día 18 a primera hora de la mañana y 24 horas antes de la fecha de entrar en el hotel, Nuria F. llamó personalmente a Solimar para comunicarles que cancelaba la reserva porque su pareja estaba hospitalizada. También les explicó el motivo. «Me dijeron que no había problema. Incluso me dieron las gracias», afirma Nuria. La afectada asegura que, pese a la angustia del momento, primó en ella la buena fe: «Avisé a Solimar con el único objetivo de que dispusieran de la habitación para otros clientes».