El rapero Pablo Hasel, que se enfrenta a una posible pena de cinco años de cárcel, ha señalado que, si el Tribunal Supremo no admite su recurso, entrará en prisión "con mucha pena, con mucha rabia" pero a la vez "orgulloso" y con "fuerza para seguir", ya que en sus letras contó "hechos objetivos".

Hasel ha sido condenado esta semana a dos años de prisión y otro de multa (que no piensa pagar, por lo que se sumará a la pena), que se suman a otros dos de una sentencia previa de 2015.

El rapero ilerdense ha participado hoy en el Centro Social Comunitario Luis Buñuel de Zaragoza en una charla sobre la libertad de expresión y, en declaraciones previas a los medios, ha insistido en que "no hace falta compartir todo lo que decimos para ver que esto es una barbaridad".

Sí que ha querido aclarar, desmintiendo así a algunos medios de comunicación, que no está condenado por enaltecer a ETA, sino por defender a "presos políticos antifascistas", denunciar "asesinatos y torturas" policiales o criticar a la monarquía con "hechos objetivos" que han aparecido hasta en la prensa del corazón, como el "silencio" de supuestas amantes del rey emérito "pagado con dinero público".

Asimismo, ha recalcado que siempre ha dicho que hay acciones de "estos grupos armados" que ha apoyado, mientras que con otras ha sido "mucho más crítico", pero que en esta sentencia no aparece ninguna de ellas.

Posteriormente, en la charla, ha denunciado que tenga que ir cinco años a la cárcel por decir cosas que se han dicho "hasta en Sálvame", pero que como son "republicanos militantes" y "comunistas", "les jode más".

Ha llamado a la fiscal de su caso "fascista asquerosa", aunque le ha agradecido la "honestidad" al incluir en su escrito que con sus letras llamaba a la movilización, lo cual ha reconocido.

No obstante, Hasel ha considerado que "mintió" cuando argumentó que la libertad de expresión tiene los mismos límites en España que en otros países de su entorno, ya que a su juicio los raperos de otros países son "incluso más cañeros" y no son "reprimidos".

"Ni siquiera en Estados Unidos, donde la policía asesina con total impunidad" y donde se "escandalizan" por condenas como esta, ha asegurado.

Por otro lado, ha querido subrayar que no ha sido condenado por la "Ley Mordaza" y que el PP "no es el único responsable", y ha extendido esta responsabilidad a todos aquellos partidos que "no quieren disolver este tribunal fascista", en referencia a la Audiencia Nacional.

En este sentido, ha sido especialmente crítico con Podemos por no llevar esta disolución en su programa o por lanzar "vivas a la Guardia Civil" o manifestarse en Asturias para subir el sueldo de un cuerpo que infringe "palizas" a manifestantes.

"No podemos estar con el oprimido y el opresor a la vez. ¿Cómo van a estar en nuestro bando?", ha añadido, también refiriéndose a la formación liderada por Pablo Iglesias y apelando al público que llenaba la sala a "saber quién está de nuestro lado".

A la vez que ha extendido esta responsabilidad al PCE o a IU, a quienes ha tachado de "izquierda mal llamada" y ha acusado de mantener un "silencio cómplice" con el sistema, ha criticado que Pablo Iglesias podría llamar "a tomar la calle", pero que en su lugar "sube un tuit y se lava la cara".

Antes, ha denunciado que ya han sido 15 raperos encausados en España por delitos de opinión, "todos ellos antifascistas", en lo que ha calificado como una nueva "inquisición".

También ha relatado como, durante el registro de su domicilio, le "secuestraron" libros y ordenadores suyos y de su familia como si de "la Gestapo nazi" se tratara", porque "este Estado psicópata" también quiere hacer daño a las familias, lo que ha relacionado con la dispersión de presos etarras.

De momento, ha lamentado, la respuesta ha sido todavía "muy débil" y "poco contundente".

Ha concluido manifestando que "nuestra libertad solo será posible haciendo que tenernos presos les salga mucho más caro que tenernos en la calle".

Hasel ha compartido mesa con el periodista Boro LH, condenado a un año y seis meses de prisión por enaltecimiento del terrorismo y procesado en otra causa por la que le piden seis años de cárcel y 6.200 euros de multa por atentado a la autoridad y lesiones contra dos agentes mientras cubría una manifestación en marzo de 2014.

Boro LH ha llamado a "desmitificar" la "Ley Mordaza", dado que muchos de estos casos, como el suyo, son previos a la aplicación de la norma.

El ataque a los movimientos sociales o a los medios de comunicación son algunos de los ejes que ha destacado de actuación del Estado en este ámbito.