La Guardia Civil y Vigilancia Aduanera se han incautado de un alijo de 600 kilos de cocaína camuflada bajo cajas de bananas en un contenedor de mercancías que llegó al puerto de Valencia y que fue inspeccionado por los agentes.

La operación, que sigue abierta y no ha conducido a ninguna detención, se ha llevado a cabo en el marco de las labores preventivas que habitualmente desarrolla la Unidad de Análisis de Riesgo de la Guardia Civil en el Puerto de Valencia junto al Servicio de Vigilancia Aduanera.

En los trabajos de prevención se seleccionan contenedores para ser inspeccionados sin necesidad de una investigación previa, como filtro general para evitar el narcotráfico y otras prácticas ilegales, según informa el instituto armado. Y en esta selección, encontraron el alijo de cocaína.