La Guardia Civil ha alertado hoy de los riesgos del juego de la'Ballena azul', por el que supuestamente una joven ha sido hospitalizada en Barcelona, y ha precisado que en España se ha tenido conocimiento "de algún caso que, aunque aislado, pudiera estar relacionado con el peligroso juego".

El instituto armado y la Policía Nacional han alertado hoy en Twittera los padres de la peligrosidad de juegos que se ofrecen a jóvenes en internet y redes sociales, como el de la 'Ballena azul', recordándoles que deben vigilar a sus hijos cuando utilizan las redes sociales, y también fijarse en si cambian de conducta.

Lo han hecho después de que se haya sabido que una adolescente ha ingresado en un hospital de Barcelona tras participar supuestamente en algunas pruebas del citado juego virtual, en el que los participantes van superando retos peligrosos hasta llegar al suicidio.

Este caso es el primero que se ha conocido públicamente en España y fue el entorno de la menor el que alertó a la familia de que participaba en ese juego, tras lo que los Mossos d'Esquadra hicieron un seguimiento a la joven para garantizar su asistencia médica, como finalmente ha ocurrido. Ahora los Mossos investigan si realmente la joven jugaba a este juego y en qué circunstancias.

Precisamente en los últimos días gobiernos y autoridades de diversos países latinoamericanos, entre ellos Brasil, Bolivia, Colombia, Chile o Uruguay, han alertado públicamente sobre los riesgos de este macabro juego, que habría originado ya varias muertes entre los adolescentes de estos países.

Hoy el Grupo de Delitos Telemáticos (GDT) de la Guardia Civil ha publicado varios mensajes en Twitter tras "las alarmantes noticias" sobre el juego de la ballena azul en los que aconseja prevenir y no dejar solos a los menores en la red, ni bajar la guardia en la responsabilidad que tienen los adultos sobre los pequeños.

LOS RIESGOS DE INTERNET

El GDT enlaza un comunicado en el que incide en que los menores no son consientes de los riesgos de internet y además la curiosidad que les genera lo desconocido "pudiera llevar a que este peligroso juego llegue a los adolescentes en España, donde ya hemos tenido conocimiento de algún caso que, aunque aislado, pudiera estar relacionado con el peligroso juego".

Detalla que el citado juego consiste en la realización de 50 retos en 50 días de los que los jugadores deben mostrar fotos o vídeos -como cortarse los labios o asomarse a un precipicio- y que acaban con la propuesta de su suicidio, normalmente lanzándose al vacío desde un piso alto.

"Los responsables de este juego, o comunidades similares, son expertos en ingeniería social, teniendo la capacidad de llegar a la manipulación de sus víctimas gracias a la información que previamente han recabado de ellos a través de sus perfiles en redes sociales" y además saben amenazar a los menores para evitar que dejen la actividad sin el consentimiento del manipulador, añade.

Por eso la Guardia Civil aconseja a los padres acompañar a los más pequeños en la navegación por internet, y conversar con ellos, sobre todo si son adolescentes, sobre los peligros a los que se pueden enfrentar en la red, escuchándoles por si ya se han expuesto a estos riesgos y estando atentos a posibles cambios en su físico o su conducta.

Por su parte, la Policía ha publicado un tuit en el que advierte: "Las redes sociales tienen sus riesgos, no dejes solos a tus hijos y enséñales pautas seguras. Si observas cualquier conducta extraña, pide ayuda llamando al 091".

El mensaje se publica junto a una foto con el consejo: "Evita que caiga en 'juegos' peligrosos".

Fuentes de este Cuerpo han explicado que no hay una alerta específica por el hecho de que el juego de "la ballena azul" esté llegando a España.

Pero -han precisado- son varios los "juegos" que se mueven por las redes y que pueden desembocar en conductas peligrosas para los jóvenes, como el recientemente detectado "juego del muelle", en el que varios chicos se sientan en círculo y mantienen una erección mientras las chicas se van sentando sobre ellos, y el primero que eyacula pierde, sin protección.