La Guardia Civil ha desarrollado, en coordinación con el Juzgado de instrucción 4 de Ponferrada, una operación en varias provincias españolas para desmantelar una red que comerciaba con carne de caballo, han informado fuentes del instituto armado.

La investigación la está desarrollando la Unidad Central Operativa Medio Ambiental del Seprona de la Guardia Civil, que sospecha de una red que comercializaba con carne de caballo sin los controles sanitarios pertinentes. Se están practicando detenciones.

La operación, que se mantiene abierta, comenzó el pasado martes en Palencia y León, según han confirmado fuentes de la Guardia Civil. Se investigan actuaciones irregulares relacionadas con el negocio de la carne de caballo que se refieren tanto a su procedencia como al tratamiento que se le da al producto.

Como consecuencia de la primera fase de la operación, el juez de Ponferrada decretó el jueves el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de ocho detenidos, acusados de vender la carne de caballo no apta para consumo humano.

COMERCIALIZACIÓN EN EL EXTRANJERO

La denominada 'operación Gazel' investiga una red ilegal de venta de carne de equino y hasta el momento han sido detenidas casi una veintena de personas en diez provincias de siete comunidades autónomas. Las irregularidades parten tanto del proceso de sacrificio de los animales como en la posterior distribución de la carne, según han señalado a Efe fuentes de la investigación.

Las últimas detenciones tuvieron lugar el miércoles en la provincia de Lugo, donde dos personas fueron arrestadas. Ese mismo día, los gentes de la Guardia Civil practicaron registros en Monforte de Lemos, en la sede de una empresa de pieles en el polígono de Reboredo, y en Vilalba, en el domicilio de un tratante de caballos de Codesido.

En la investigación también participa Europol ya que se sospecha que la carne es utilizada para la elaboración de ciertos productos que posteriormente son vendidos en el extranjero.