La ministra de Sanidad, Servicios e Igualdad, Dolors Montserrat, ha asegurado que la futura normativa para frenar el consumo de alcohol en menores «no será intervencionista» ni «una ley de multas», sino de «sensibilización y prevención» y ha abogado por trasladar este tema «a las aulas». Dos meses después de tomar posesión de su cargo, Montserrat detalla, en una entrevista con Efe, sus propuestas para esta legislatura, entre las que destaca la aprobación de esa ley, que está convencida de que saldrá adelante «con consenso».

Esta norma se gestará en el seno de la comisión mixta Congreso-Senado para el Consumo de las Drogas, que empezará sus trabajos en enero con el cometido de elaborar un informe previo a la redacción del anteproyecto de ley. La ministra ha insistido en que no será una ley punitiva, aunque podría contemplar sanciones para padres a cuyos hijos «se les haya pillado cinco o equis veces» bebiendo alcohol en la vía pública y no les hayan llevado a los cursos de sensibilización que se imparten para estos jóvenes. En su opinión, esta ley debe contar con el apoyo de la industria del alcohol.

CURRíCULUM ANÓNIMO / Otro de los retos en los que Montserrat ha puesto el acento, ya en materia de igualdad, es el «currículum anónimo», un proyecto que ya se ha implantado en países como Reino Unido, Francia o Alemania y cuyo objetivo es evitar la discriminación por sexo, edad u orientación sexual en el ámbito laboral y garantizar la igualdad de oportunidades. Así, quiere que ya este año se ponga en marcha el proyecto piloto en un grupo de empresas, en las que, voluntariamente, se generalizará esta práctica para poder evaluar los resultados antes de su implantación. «Lo importante no es si eres mujer, transexual o tienes 50 años», sino tu capacidad y tu formación», subraya.