El Gobierno ha paralizado la regulación de la venta de leche cruda que el Ejecutivo del PP estaba tramitando después de la polémica que ha generado que la Generalitat haya dado luz verde a su comercialización a granel.

Según ha informado el Ministerio de Sanidad, el nuevo equipo, capitaneado por Carmen Montón, al frente de este departamento está revisando el borrador de Real Decreto en el que el Gobierno anterior trabajó durante varios meses, por lo que "queda paralizada su tramitación hasta que concluya el análisis completo".

Catalunya en cambio permitió la semana pasada la venta de leche recién ordeñada sin tratamiento térmico previo, pese a que los médicos advierten que su consumo sin hervir puede causar infecciones importantes. La 'consellera' de Agricultura, Ganadería y Pesca, Teresa Jordà, ha hecho una defensa a ultranza de la decisión con el argumento de que la ganadería catalana goza de muy buena salud y está libre de brucelosis bovina, así como con declaraciones polémicas del tipo consumir leche cruda "tiene el mismo peligro" que comer "un pollo que lleva cuatro semanas en la nevera".