"¿Cómo has venido?", "en metro, por supuesto". Esa ha sido una de las preguntas y una de las respuestas más habituales este miércoles en la entrada a la feria turística internacional Fitur. "España es hoy un referente mundial del turismo que se ha visto ensombrecido por la huelga de taxis", lamentaba la ministra de Industria Comercio y Turismo, Reyes Maroto, después del 'paseillo' oficial con los Reyes y la secretaria de Estado de Turismo, Isabel Oliver, para inaugurar la feria. No obstante, y aunque el 'tema taxi' ha estado presente prácticamente en todas las conversaciones también se diluía con rapidez y los negocios y el turismo copaban el discurso.

Durante esta primera jornada presentó sus resultados el grupo Barceló que anunció una inversión de alrededor de 600 millones en 110 proyectos hasta el 2021. La compañía, que cerró el año pasado con 249 establecimientos y 55.014 habitaciones en 22 países. "Sobre los resultados económicos de 2018, aunque todavía no son definitivos, serán similares a los de 2017, que fue un año histórico, y rozarán los 3.000 millones de euros en ventas, con un beneficio neto consolidado de 180 millones de euros", señaló el CEO para EMEA de Barceló Hotel Group, Raúl González.

Meliá, además, avanzó durante su presencia en Fitur que tiene prevista 63 nuevas aperturas en los próximos tres años, de las cuales 51 están previsto que se abran entre este año y el año que viene con el ojo puesto en Latinoamérica, sureste asiático y Mediterráneo. Sin embargo, casi todos ellos (98%) serán en régimen de gestión, es decir, otra empresa los construye y Meliá los opera. "La compañía va hacia un modelo de gestión y la inversión, por tanto, será muy limitada", señaló el vicepresidente ejecutivo de la primera compañía hotelera española, Gabriel Escarrer.