Los familiares de Juana Rivas que han sido citados por su presunta colaboración en la sustración y ocultación de los hijos de la madre granadina durante casi un mes se han acogido este miércoles a su derecho a no declarar ante el juzgado de instrucción número 2 de Granda, según ha explicado su abogado, Juan de Dios Ramírez.

Tras la citación, la fiscalía no prevé pedir ningún tipo de medidas cautelares. Aún así, el letrado que representa en la investigación penal a Rivas ha reconocido que la situación de la madre de la localidad granadina de Macarena "es muy complicada".

Los familiares han llegado esta mañana, minutos antes de la 10.00 horas, al Juzgado de Instrucción 2 de Granada para declarar como investigados por su presenta intervención en la sustracción de los dos hijos de esta vecina de Maracena, quienes ya están con su padre.

Los progenitores de Rivas, Juana y Manuel, además de su hermana Isabel, han accedido a los juzgados de La Caleta acompañados de sus abogados y han eludido hacer declaraciones a los medios.

La citación judicial de los familiares de Juana Rivas se produce un día después de que la asesora jurídica del Centro Municipal de Información a la Mujer de Maracena, Francisca Granados, y la psicóloga de este servicio, Maite Sanz, fueran citadas por los mismos motivos.

Ambas se acogieron también a su derecho a no declarar pero negaron en su comparecencia posterior antes los periodistas haber cooperado en la sustracción de los menores.

SUS ASESORAS DECLARARON

La asesora jurídica de Rivas detalló que pese a no declarar sí habían hecho constar que no han participado en la comisión de ningún delito.

"De manera rotunda y clarísima que jamás, jamás, en ningún caso, hemos inducido, apoyado o cooperado en la comisión de ningún delito, ni de sustracción de menores ni de nada", declararon Granados y Sanz ante la juez, según relataron después a la prensa.

Granados defendió que las dos actuaron, como funcionarias de un centro especializado en proteger a las víctimas de violencia, "de la mejor manera posible" y en el marco de sus competencias, y recalcaron que durante este año y tres meses han actuado con Rivas igual que con las más de un centenar de usuarias anuales del centro.

"Vino huyendo de Italia para pedir protección y apoyo para ella y sus hijos como víctima", recordó Granados.

Rivas entregó el lunes a los dos menores a su padre, Francesco Arcuri, quien fue condenado en el 2009 por un delito de lesiones en el ámbito familiar, pero sigue investigada por la vía penal por sustracción y desobediencia a la justicia.