Un hombre salva una pitón de 2,5 metros de largo que cruzaba una autopista de oeste de Australia. Antes de realizar tan loable acción, el buen samaritano decidió estirarse en el asfalto, junto al animal, y echarse unas fotos con la ayuda de sus acompañantes. La imagen, algo surrealista, fue colgada en su página de Facebook para destacar las proporciones de la enorme bestia.

El amante de las serpientes gigantes se llama Matthew Bager y cuando se cruzó con la pitón se dirigía en coche con unos compañeros al puerto donde trabajan, según ‘Daily Mail Australia’, el medio que se hizo eco de esta curiosa historia. "Al principio pensé que era una cuerda de amarre de un barco, pero cuando descubrimos que era una serpiente volvimos atrás y pusimos las luces”, recuerda Bager, quien se quedó allí unos cinco minutos hasta que el animal estuvo fuera de peligro.