Más de la mitad de los españoles (57%) pagaría más impuestos si la recaudación fuera destinada directamente a combatir la pobreza infantil, según una encuesta de Save the Children, que revela también que ocho de cada diez ciudadanos piensa que este problema debe convertirse en una prioridad para el futuro Gobierno.

El estudio constata que la mayor parte de la población considera «imprescindible» la intervención del Estado y de las comunidades autónomas para acabar con la pobreza infantil, que afecta a 2,2 millones de niños y niñas en España.

Gabriela Jorquera, portavoz de Save the Children, señaló ayer que, al margen de la definición estadística, «lo que mejor describe la pobreza es que no se tiene margen para lidiar con los problemas. Cualquier imprevisto puede significar un desequilibrio en las familias y un problema pequeño se convierte en muy grande».