La Fiscalía argentina investiga las responsabilidades de lo ocurrido en el concierto del cantante Carlos Alberto Indio Solari, donde con un exceso de aforo de al menos 180.000 personas una avalancha causó la muerte de dos hombres y decenas de heridos la madrugada de ayer. En una rueda de prensa para dar explicaciones por la tragedia, el intendente de la localidad bonaerense de Olavarría, donde ocurrió el suceso, Ezequiel Galli, reveló que las condiciones de seguridad del lugar donde transcurrió el show estaban previstas para 170.000 personas, alrededor de la mitad de los que finalmente asistieron.

Pese a las advertencias del público y del propio cantante, que se vio obligado a interrumpir su actuación varias veces, una oleada de gente sobrepasó a los encargados de seguridad y provocó una avalancha que presionó a los asistentes de las primeras filas y causó la muerte de dos hombres, ambos de 40 años.

«Lamento profundamente que lo que debería ser una fiesta terminó siendo lo que fue. Si bien no tenemos responsabilidades legales con los fallecidos, como intendente me siento responsable de la situación», dijo Galli, quien confirmó que otras doce personas permanecen hospitalizadas por diversas causas, dos de ellas muy graves.

Insistió en que la Justicia está investigando las responsabilidades, ya que había un contrato de alquiler firmado con una empresa privada -la productora de Solari- que es la que debía encargarse del concierto. Este domingo, la fiscal del caso, Susana Alonso, coincidió con el intendente en que aunque todavía están investigando sobre el terreno junto a la policía científica, la causa principal pudo haber sido el exceso de público, deseoso de presenciar el regreso de su ídolo después de un año retirado de los escenarios por la enfermedad de Parkinson que padece.

En ese sentido, aseguró que aunque el recinto estaba en condiciones de albergar, a lo sumo, a 200.000 personas, las imágenes aéreas obtenidas por cámaras de drones revelan que pudieron superar las 400.000. «Hubo personas que se salieron después de la primera canción porque no se podía estar, porque había demasiada gente (...), hubo venta de entradas sin límite y también gente que entró sin ella», afirmó la fiscal en declaraciones al canal de televisión Todo Noticias.

De hecho, la titular del Ministerio Púbico de Olavarría, quien según medios locales solicitó tomar declaración a Indio Solari como testigo de los hechos, confesó que antes de que tuviera lugar el concierto ya estaba «muy preocupada» por la capacidad del predio «La Colmena», sede de una antigua cooperativa agropecuaria, donde se celebró. Asimismo, dijo que ya tomaron declaración a la productora del exlíder de la banda de rock «Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota» y les notificaron que se emprendieron acciones penales para averiguar los motivos de lo sucedido.

«Toda la seguridad de adentro la manejaban ellos» y, por tanto, a su juicio, fueron los responsables de la entrada de gente sin límite, con y sin entrada.

El presidente argentino, Mauricio Macri, en una entrevista con América TV, envió sus condolencias a las familias de las víctimas y consideró el suceso como «muy triste», al tiempo que recalcó la necesidad de respetar la ley.