Doce personas han sido detenidas y otras 25 han sido investigadas por la Guardia Civil en una operación por un presunto fraude en la gestión de residuos de la construcción que se vertían ilegalmente en un parque natural en Nerja (Málaga), en la que se han visto implicados empresarios y cargos públicos.

La denominada operación "Rubbish", realizada bajo la dirección y coordinación de la Fiscalía de Medio Ambiente de Málaga y el Juzgado de Instrucción número 1 de Torrox, ha supuesto además la investigación de 11 personas jurídicas, así como el bloqueo de más de 170 bienes muebles e inmuebles valorados en más de 5 millones de euros.

El instituto armado ha explicado hoy en un comunicado que a los investigados se les imputan presuntos delitos contra el medio ambiente, falsedad documental, estafa, pertenencia a grupo criminal, prevaricación medioambiental omisiva y prevaricación administrativa.

La investigación se inició en agosto del pasado año, a raíz de las denuncias presentadas por el vertido ilegal e incontrolado de residuos de la construcción y demolición, residuos peligrosos, residuos de podas y vegetación o plásticos en una antigua cantera situada en el Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama.

Los agentes comprobaron que desde hacía más de 15 años, el vertedero, ubicado en el paraje del Río de la Miel, estaba siendo explotado y gestionado económicamente por un grupo de empresas del sector de la construcción del municipio de Nerja que incumplía las normas administrativas.

Se llegaron a expedir certificaciones acreditativas a clientes de que los residuos habían sido depositados en vertederos controlados, por lo que se sintieron engañados ya que habían pagado un servicio bajo la creencia de que los materiales estaban siendo gestionados correctamente.

Según la Guardia Civil, existía un potencial riesgo de incendio, además de otros graves peligros medioambientales, por la estabilidad del vertedero o la contaminación por filtración de los líquidos a las aguas subterráneas.

El instituto armado ha indicado que el fraude destapado podría ascender a más de 2,5 millones de euros, que sería el coste aproximado de la correcta gestión de esos residuos que han sido vertidos indiscriminadamente y de manera ilegal en el vertedero del Río de la Miel.

Se estima, según informes técnicos, que el volumen total aproximado de los residuos existentes en dicho vertedero podría ser más de 800.000 metros cúbicos, y que el coste aproximado de restauración podría superar los 10.700.000 de euros.

La alcaldesa de Nerja, Rosa Arrabal (PSOE), confirmó ayer en rueda de prensa que había sido llamada a declarar esta semana por la Guardia Civil en calidad de investigada en relación a este asunto, junto a dos concejales del actual equipo de gobierno.

Asimismo, fuentes municipales señalaron que miembros del anterior equipo de gobierno, ocupado por el PP desde 1995, también han declarado como investigados por la gestión de este vertedero, que fue clausurado en septiembre de 2016.