Los Mossos d’Esquadra y la Policía Local de Alcarràs (Lleida) detuvieron a dos personas e identificaron a otras tres acusadas de pescar furtivamente cerca de 1.000 kilos de carpas y siluros en la cuenca del río Segre, mediante redes de captura masiva y descargas eléctricas. Los dos presuntos pescadores furtivos fueron sorprendidos en dos ocasiones entre los días 7 y 9 de marzo cuando viajaban en una furgoneta en la que llevaban sacos llenos de pescado, barcas hinchables y utensilios de pesca prohibidos. Los detenidos fueron sorprendidos el pasado 7 de marzo, en un patrullaje preventivo de la policía local de Alcarràs, cuando llevaban cinco sacos con más de un centenar de carpas y dos siluros de 75 centímetros cada uno, que pesaban 500 kilos. Dos días más tarde, los interceptaron a otra furgoneta en la que llevaban dos sacos con 25 carpas y 14 siluros, con un peso de más de 400 kilos.