Agentes de la Policía Local de Sevilla detuvieron ayer miércoles a un miembro de La Manada, Ángel Boza, por la presunta sustracción de unas gafas de sol de un centro comercial del centro de Sevilla y acometer con su coche contra los vigilantes de seguridad.

Según informaron a Europa Press fuentes municipales, en la tarde de ayer agentes del Grupo Giralda (Policía Turística) de la Policía Local de la capital hispalense interceptaron en la avenida Menendez Pelayo a Boza cuando conducía un vehículo tras acometer contra dos vigilantes de un centro comercial que le sorprendieron sustrayendo unas gafas de sol del establecimiento.

Los agentes de seguridad privada persiguieron al posteriormente detenido hasta los aparcamientos del mismo, donde tenía estacionado su vehículo. Lejos de atender las indicaciones de los vigilantes, acometió con su coche contra dos vigilantes, que resultaron lesionados y precisarán asistencia médica, aunque su estado no reviste gravedad.

Los responsables del centro comercial comunicaron lo ocurrido al Grupo Giralda de la Policía Local (Policía Turística), cuyos agentes localizaron el coche y al detenido circulando en las inmediaciones de los Jardines de Murillo.

El detenido, que se encontraba anoche en las dependencias de la Policía Nacional en Blas Infante para la práctica de las diligencias oportunas, tiene en vigor una suspensión temporal del permiso de conducción por un Juzgado de lo Penal de Sevilla, lo que supone la comisión además de un delito contra la seguridad vial. Bouza se arriesga a volver a la cárcel con su acción delictiva de ayer. La polémica continúa sin abandonar a los miembros de este conocido grupo que fueron puestos en libertad por los jueves tras una condena por abusos sexuales. Hace sólo unos días los jueces debieron pronunciarse de nuevo sobre un discutido intento de otro de los miembros del grupo de sacarse el pasaporte pese a no poder salir del país.