La Guardia Civil asestó ayer un duro golpe a la logística del transporte de hachís en Andalucía, en una operación con 20 detenidos y en la que se han incautado cientos de miles de euros. Fuentes cercanas a la investigación precisaron que más de 300 agentes de la Guardia Civil participaron desde las 5.30 horas en un operativo desplegado en las provincias de Sevilla, Málaga, Granada, Huelva y Cádiz, en las que se efectuaron 24 registros.

En el Campo de Gibraltar se han llevado a cabo ocho registros en las localidades de Algeciras y Tarifa. En Sevilla se han producido 11 registros en la capital, Pilas, Villamanrique, Bollullos de la Mitación, La Algaba, Isla Mayor, Coria y Umbrete. Además, los agentes han realizado tres registros en las localidades malagueñas de Villanueva del Trabuco y Villanueva de Tapia, uno en Huétor Tájar (Granada) y otro en Isla Cristina (Huelva).

Esta operación se enmarca en el dispositivo especial de la Guardia Civil contra el narcotráfico en el área del Estrecho de Gibraltar y su zona de influencia y ha contado con la colaboración de la Policía de Gibraltar. Se trata, según las fuentes, de un golpe a una de las patas del narcotráfico, el transporte, controlado por las collas que operan en Andalucía.

Entre los arrestados figuran miembros de esos grupos dedicados al arreglo de las narcolanchas y a su puesta en funcionamiento para el traslado de la droga desde Marruecos a las costas andaluzas. De hecho, en uno de los registros llevados a cabo y relacionados con uno de los detenidos, dedicado al arreglo de las narcolanchas, se han incautado cientos de miles de euros.

La Guardia Civil explica que, fruto de la presión que está ejerciendo en el Campo de Gibraltar a las organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico, éstas se están desplazando a otras zonas de la costa andaluza y al río Guadalquivir. Durante la mañana también fue intervenida en la provincia de Málaga una embarcación que se había desplazado hasta esa zona para intentar eludir a la Guardia Civil. A los detenidos se les imputa los delitos de pertenencia a organización criminal, blanqueo de capitales, contra la seguridad del tráfico, contrabando y tenencia ilícita de armas.

La operación contra la logística de los narcotraficantes que actúan en Andalucía ha sido un golpe en la línea de flotación de los grupos dedicados al transporte de la droga, o más bien, al tuneo de lanchas para utilizarlas en el traslado de hachís desde Marruecos. Y es que la prohibición de las narcolanchas por un decreto ha disparado la imaginación de los narcos, que han tenido que recurrir a especialistas para tunearlas y modificar motores.