La Guardia Civil ha desarticulado una trama de compraventa a través de internet de armas detonadoras que transformaban para que dispararan fuego real, en una operación que se saldó con la detención de dieciocho personas en varias provincias españolas. Se trata de la operación Benjamín, en la que otras tres personas figuran como investigadas, que se inició tras la detención de una violenta activista de un grupo antisistema gallego que vendía en internet armas detonadoras que ella misma transformaba. A los implicados se les imputa tráfico y tenencia ilícita de armas, integración en organización criminal, depósito de explosivos, tráfico de drogas y blanqueo de capitales.

En la operación se incautaron siete armas de fuego sin legalizar, 28 pistolas detonadoras transformadas para efectuar fuego real, 26 armas en proceso de transformación y 20 pistolas de descargas eléctricas. Además un silenciador, 2.100 cartuchos de diferentes calibres, ocho artefactos explosivos de fabricación casera, 139.950 euros en metálico, 1,5 kilos de cocaína y siete de hachís, una ballesta, dos arcos y 30 flechas, entre otros efectos. La investigación se inició en 2016 a raíz de la operación Bosphorus realizada a nivel europeo y coordinada por Europol, en la que la Guardia Civil detuvo a 46 personas e intervino 247 armas de fuego y más de 23.000 cartuchos metálicos de diferentes calibres.

A raíz de dicha operación la Guardia Civil descubrió que la citada conocida activista de grupos antisistema gallega, que ya había sido condenada por el lanzamiento de varios artefactos incendiarios contra el centro financiero de Vigo (Pontevedra), vendía en internet armas detonadoras que transformaba para que pudieran efectuar fuego real, así como la munición. Para ello se valía de diferentes personas a las que utilizaba como testaferros para realización los envíos de las armas y la recepción de los pagos. El 24 de enero de 2017 se procedió en Vigo a su detención y se la intervinieron ocho pistolas que tenía listas para su venta, 3.000 euros en metálico, así como más de 200 cartuchos y abundante documentación. Fruto del análisis de dicha documentación intervenida se pudo identificar a numerosas personas que habían comprado armas a la trama desarticulada y que las poseían ilegalmente, tratándose en muchos casos de personas con numerosos antecedentes policiales, lo que evidenciaba que las habían adquirido con fines ilícitos. Por ello, el pasado miércoles se ejecutó la segunda fase de esta operación, con la detención inicialmente de 16 compradores, y se realizaron los registros en sus domicilios.