Las familias de dos de las víctimas del tiroteo en una escuela de Parkland (Florida) anunciaron ayer que demandarán a la compañía que fabricó el arma utilizada por el autor de la matanza de febrero, en la que murieron 17 personas, así como a la tienda que la vendió. El padre de uno de los jóvenes, denunció el «desmesurado» aumento de fabricación de este tipo de armas.